Sabes
que no quería bailar contiguo,
te lo dije, una y otra vez,
pero en vista de tu insisten-cía,
tu, arrogan-cía y tu presen-cia,
me, convenciste a la tercera vez.
Amor
que amargura,y que dolor,
tu, con viven-cía,
por que, des pues de tantas y tantas cosas,
tu, traición me bol-vio loca,
traicionando-me con otra mujer.
Pero
tu sabes muy bien,
que amor puro como el mío,
nadie, te lo puede ofrecer,
solo lo encuentras con migo.
Sabes muy bien,
que no quería bailar contigo,
te lo dije una, y otra vez,
pero en vista de tu insistencia,
tu arrogan-cía, y tu presen-cia,
me convenciste a la tercera vez.
Maria del Carmen Pallas Seijo